San Juan del Río, Qro., enero 31 del 2016.- Con el propósito de realizar un llamado enérgico a las autoridades municipales para que asuman el papel que les corresponde en cuanto a garantizar una seguridad pública próxima en la población, marcharon por el centro de la ciudad un aproximado de 500 personas, encabezadas por Violeta Álvarez Ibarra y por María del Mar Cabello Morales, viuda de Javier Pérez Vázquez quien murió por un disparo de arma de fuego el pasado 04 de enero, cuando intentaron robarle su automóvil; y familiares de Víctor Hugo Mondragón, transportista asesinado también en un robo sobre el Boulevard Hidalgo el pasado 23 de enero por la tarde.
La marcha salió de la avenida Juárez, a la altura del Monumento a Benito Juárez, hasta llegar a la calle de Hidalgo y de ahí a la Plaza Independencia donde María del Mar Cabello Morales, dio lectura a un manifiesto en el cual se exige al alcalde Guillermo Vega Guerrero, iluminación de todas las colonias y comunidades del municipio; solicitan respuesta con hechos reales, acciones que brinden resultados positivos a la población; que los funcionarios cuenten con los conocimientos necesarios para desempeñar de manera correcta los cargos con vocación de servicio en el caso de los policías que no estén ni comiendo ni dormidos, respuesta inmediata y de orientación por parte del sistema de emergencias a la población, atendiendo a las emergencias sin colgar el teléfono y que acudan en la brevedad al llamado ciudadano y no dejar espacios largos de tiempos de hasta dos horas y sobre todo el esclarecimiento de robos, homicidios, violaciones, pero siempre apegados a los métodos científicos y con la absoluta verdad de las situaciones; además de establecer estrategias efectivas de seguridad, sin importar que los encargados de realizarlas provengan de otras entidades.
“San Juan del Río exige hoy calidad de vida”, dijo María del Mar Cabello Morales, al término de estas peticiones que serán protocolarizada por un Notario Público y que serán entregadas el próximo Miércoles Ciudadano en las manos del alcalde Guillermo Vega Guerrero, puesto que la inseguridad no permite que varias personas regresaran a sus hogares con sus familias y que desgraciadamente la autoridad municipal en materia de seguridad pública ha sido rebasada en demasía.