México, 1 Feb.- Las pruebas genómicas permiten al personal médico saber el tipo de tumor puede tener un paciente y, por tanto, definir el tratamiento adecuado para atender tanto los tumores malignos sólidos como los hematológicos.
Esto permite una mayor sobrevivencia e incluso la curación de los pacientes, al no desgastarse con tratamientos que no funcionan para el tipo de cáncer que presentan, y entonces se les ofrece la inmunoterapia, terapia blanco o quimioterapia que más les beneficie.
Según cifras oficiales, entre el 2013 y 2018, en México, cada año se registraron más de 130 mil nuevos casos de cáncer, aproximadamente 75 por ciento se diagnosticaron en etapas avanzadas, destacando como los tipos más frecuentes los cánceres de pulmón, mama, cervicouterino, próstata, hígado y gástrico.
En conferencia de prensa, el oncólogo Jerónimo Rodríguez Cid, dijo que hasta antes de la secuenciación genómica, tradicionalmente se establecía el tratamiento, de acuerdo al órgano en el que se localizara el tumor cancerígeno.
“Hoy sabemos que es más efectivo diferenciar cada tipo de cáncer en función de alteraciones en los genes, y hay pruebas como la Foundation One Cdx con la que se ahorra tiempo, recursos y molestias a los pacientes y a los médicos”, subrayó.
Esta prueba analiza e interpreta 324 genes relacionados a tumores malignos sólidos, y estado de biomarcadores tumorales, MSI (inestabilidad de microsatélites) y TMB (carga mutacional tumoral); ya que estos son importantes para predecir la respuesta a la inmunoterapia.
También se utiliza la prueba Foundation One Liquid, diseñada para ayudar a los médicos a seleccionar un tratamiento dirigido para pacientes con tumores sólidos, cuando el tejido no está disponible o no es óptimo para obtener una biopsia.
Con este método se extrae una muestra sanguínea y se examina el ADN tumoral circulante en la sangre. Analiza e interpreta 70 genes relacionados al cáncer y permite encontrar la mutación que se debe atender, así como el estado de MSI para predecir la respuesta a la inmunoterapia.
La inestabilidad microsatelital ocurre cuando las células reparadoras del cuerpo se alteran y ya no son capaces de luchar contra las células malignas.
Estas pruebas son útiles también para conocer el origen de los sarcomas, que es un estado de metástasis de un cáncer que no se sabe en qué órgano inició, y para no estar adivinando cuál es el tumor primario, con esta secuenciación es posible tener la información y dar el tratamiento adecuado.