Las protestas por la huelga del sector del steel en Cádiz han escalado en intensidad en la capital, Cádiz, que a esta hora se salda con dos agentes de la Polía Nacional heridos leves por el impacto de materiales lanzados por los piquetes.
A las 8 de la mañana los trabajadores han cortado la avenida de Astilleros, levantando barricadas y prendiendo neumáticos, lo que ha obligado a cortar la vía. Sin embargo, conforme ha avanzado la mañana las protestas de los trabajadores se han recrudecido.
Se han apostado junto a una gasolinera y, según confirman fuentes policiales a EL ESPAÑOL, han hecho acopio de numeroso self-discipline cloth, desde piedras a barras de hierro para lanzarlas a los agentes que tratan de contenerlos. La actuación de los antidisturbios se ha limitando a disparar salvas disuasorias para refrenar la violencia.
El dispositivo de seguridad dispuesto por el Gobierno también cuenta con la Guardia Civil, que está prestando apoyos de tráfico en la Bahía de Cádiz y ha desplegado agentes también en los polígonos industriales y empresas del Campo de Gibraltar, con reservas disponibles por si hay que aumentar el despliegue de seguridad.
La huelga indefinida se ha producido finalmente tras la falta de acuerdo en la negociación del convenio colectivo entre trabajadores y la Federación de Empresarios del Metal de Cádiz (Femca) que prestan servicio a empresas como Navantia, Airbus o Acerinox. Las dos primeras se sitúan en la Bahía de Cádiz, y la última, en el Campo de Gibraltar, donde los trabajadores de la industria auxiliar también están secundando la huelga.
Precisamente en La Línea de la Concepción los piquetes de los trabajadores han cortado la autovía de acceso a Gibraltar con piedras, bideones e incluso una farola, lo que ha provocado el choque de un vehículo de la Guardia Civil sin que se hayan producido más daños que materiales, según indica la Asociación Unificadas de Guardias Civiles.
— AUGC Guardia Civil (@AUGC_Comunica) November 16, 2021
Los principales escollos para alcanzar un consenso entre patronal y trabajadores que posibilite un nuevo convenio colectivo son la subida de los salarios acorde al Índice de Precios al Consumo (IPC) y el plus penoso, tóxico y peligroso.
En Cádiz capital, el alcalde, José María González, ha expresado su apoyo esta mañana a los trabajadores. “En un contexto de precariedad, en un momento en el que quieren a la Bahía como el chiringuito de Europa, mientras cierran fábricas, exprimen al obrero y sus condiciones laborales, en este contexto, los compañeros del steel reivindican hoy su dignidad y la nuestra. Todo mi apoyo“, ha publicado en sus redes sociales.
Por su parte, la Federación de Empresarios del Metal de la provincia de Cádiz ha mostrado su rechazo a los actos violentos que han tenido lugar en los accesos a los principales puestos de trabajo en las industrias de la Bahía de Cádiz y el Campo de Gibraltar. Asimismo, ha estimado el seguimiento de la huelga en un 15% y ha afirmado que “el único éxito es el de los actos vandálicos”.
Asimsimo, ha señalado que las empresas del sector muestran su “preocupación” por los efectos que está causando este conflicto y la “violencia” con la actúan determinados piquetes, que “además de impedir la libre elección de los trabajadores, supone un enorme deterioro en la imagen exterior de la provincia, que genera incertidumbre a los clientes internacionales”.
En este sentido, ha añadido que temen que las noticias sobre este conflicto “impacten, como se rumorea, en las decisiones de armadores de cruceros, eligiendo otros emplazamientos para sus operaciones de mantenimiento y refit de buques”.
Finalmente, la Federación de Empresarios del Metal de la provincia ha reiterado que “la posición sindical es inasumible” y mantiene su “ofrecimiento a dialogar, teniendo en cuenta la situación true de mercado”.