San Juan del Río, Qro., febrero 19 del 2018.- Para el sector restaurantero, el cambio recurrente de meseros ha sido un principal obstáculo para lograr una estabilidad económica, ya que por promedio un mesero dura 15 días en un centro laboral, lo que representa pérdidas monetarias significativas, dijo Antonio Rosas Carapia, presidente de la Asociación de restauranteros “Cerro de las Campanas”.
Señaló que las principales causas por las que meseros renuncian en poco tiempo de haber sido contratados son los horarios y pocos descansos ofrecidos en días festivos.
Refirió que en varios establecimientos los meseros terminan labores después de las 21:00 horas y tienen que laborar los fines de semana y días festivos, que son los días de mayor venta.
Explicó que, a los meseros recién contratados, se les ofrece una capacitación, se les entrega un uniforme y su primer salario, pero al cabo de una o dos semanas dejan el empleo y para el restaurante representa una mala imagen en la calidad y servicio, al no contar con el personal suficiente para la atención correcta de los comensales.
En el caso de los bares representa trabajar de madrugada los fines de semana, a pesar de tener buenos ingresos económicos, aseguró Rosas Carapia.
